A prisa y con responsabilidad, se trazan las últimas pinceladas de las figuras decorativas que recorren la cúpula mayor del Templo Basílica de la Inmaculada.
Al momento de acceder a su visualización general, será posible recorrer una breve historia de las devociones marianas de Guadalupe y de Nuestra Señora de Luján, como así también encontrar a aquellos hombres santos y beatos que dieron testimonio de su fe a largo del territorio americano, en tiempos lejanos y otros más cercanos.